Walmart registra una patente para llevar el súper a tu domicilio

La rivalidad entre los gigantes del retail en Estados Unidos por el trono del comercio electrónico no para de aumentar. Quizá los dos contendientes más destacados de esta lucha son Amazon y Walmart. La brecha entre ambas es todavía bastante notable, pero Walmart ha conseguido reducirla bastante desde el tercer trimestre de 2016, cuando compró Jet.com, por la que pagó algo más de 3.000 millones de dólares.

Para ello, según CB Insights, ha puesto en marcha numerosas iniciativas, que van desde el patentado de una tecnología pensada para hogares inteligentes que lleva un inventario automático de productos hasta sus inicios en el reparto de mercancías en un mismo día, para lo que han comprado la startup Parcel. El último paso ha sido el registro de una nueva patente con la que Walmart pretende llevar las tiendas físicas directamente al hogar de los consumidores. Con ello pretende eliminar por completo el tiempo que se tarda en los repartos.

Esta patente detalla diversas herramientas y sistemas para la puesta en funcionamiento de un «escaparate de tienda sin atención» que se situaría en el interior del hogar, y permitiría la compra de productos desde el «portal de acceso a la tienda» instalado en una pared de la casa. A grandes rasgos, el sistema descrito en esta patente combina el modelo de tienda sin dependientes de Amazon Go con el modelo de máquina de venta automática de startups como Bodega.

Este sistema podría incluso ayudar a los vendedores a aumentar sus ventas, ya que su presencia en los hogares al simular el tipo de compra de «toque y adquisición» típico de las tiendas convencionales. Si se llegase a comercializar, podría ademas utilizarse de manera conjunta con una o varias de las demás innovaciones en comercio electrónico de Walmart.

Cómo funcionaría el sistema descrito por la patente

Se trata de un sistema que se puede instalar en un domicilio, cuyas existencias podrían renovarse cada cierto tiempo. En este punto intervendrían un servicio de delivery o una tienda o gran superficie. Incluso, si hacemos caso a los detalles de la patente, «una unidad de transporte motorizado sin conductor«. Esto es, un drone.

Esta especie de tienda a domicilio está compuesta por un escaparate de productos no vendidos y por un área de almacenamiento. Se puede hacer que una de estas dos áreas, o las dos, cuenten con un sistema de refrigeración. De esta manera se pueden dispensar productos que precisen frío para su conservación junto con otros que no la necesiten.

En la patente no se detallan las dimensiones de la tienda. Sólo se dice que se trataría de una estructura en la que se podría entrar. No sería por tanto parecida a una máquina de vending. El cliente podría acceder tanto a la zona en la que se muestran los productos como a la de almacenaje a través de una especie de portal. Los productos se cargarían en la máquina desde el exterior de la casa. Para ello, los repartidores tendrían que acceder a la tienda a través de un «portal de carga de inventario«.

Cuando el cliente desease hacer una compra, bastaría con confirmarla. Para ello, el mostrador de productos no vendidos y la zona de almacenamiento emplearían sensores para detectar la presencia de productos, y serían capaces de reconocer cuándo se retiran de cualquiera de las dos. Y una vez elegido el producto que se quiere comprar, el sistema se encargaría de «gestionar de manera responsiva la venta al por menor» del mismo.

Los sensores que utilizaría el sistema podrían tratarse de sensores de peso, transpondedores de ultrasonidos, lectores de identificación de etiquetas de radiofrecuencia, y otros similares. Con ellos se podría activar y confirmar una devolución, ya que sólo habría que volver a colocar un objeto en su estante para que el sistema bloquease su compra o iniciase un procedimiento de devolución.

En la patente se describen mecanismos encargados de proteger la fiabilidad del sistema. También de evitar los problemas de seguridad asociados a la instalación de una tienda en un domicilio. En ella se subraya que cada uno de sus portales podría cerrarse y bloquearse a voluntad. También se afirma que el portal de acceso a los vendedores podría configurarse para cerrarse automáticamente cuando se abre la puerta para que los habitantes de la casa accedan al interior de la tienda.

Cómo se seleccionan los objetos que llevaría la tienda

Los clientes en cuya casa se instalasen este tipo de tiendas podrían enviar a la tienda de la que dependen sus preferencias de productos para incluir en el escaparate. El sistema para hacerlo no está claro, pero podría realizarse mediante un sistema de voz que comunicase con un representante del sistema. Pero la tienda podría utilizar para ello un sistema basado principalmente en los datos.

Los productos a la venta en el lineal de la tienda podrían así cambiar con base en compras anteriores efectuadas por un consumidor de la casa. No importaría si los productos se comprasen online, en una tienda física o en el mostrador instalado en la casa. En conjunto, las habilidades y funciones del sistema podrían utilizarse para, a través de la Inteligencia artificial, analizar y predecir compras futuras.

Así, una vez que el sistema «comprenda» que en un domicilio se tiende a comprar determinados productos en función de la fecha o de la estación del año, puede entrenarse para reponerlos con mayor o menor frecuencia.

Hasta ahora son todo ventajas, pero el sistema también cuenta con varios inconvenientes. Los principales, como puede suponerse, son el espacio y los costes. Por lo tanto, más que en casa unifamiliares, podría ser más popular en bloques de apartamentos o en pisos. También en residencias y alojamientos similares.