La producción e inversión en carne cultivada en laboratorio crece cada vez más. Sin embargo, aun debe superar distintos retos. Las empresas persiguen la escalabilidad del proceso de producción para lograr que sea más sostenible, capaz de abastecer a una gran parte del mercado y a un precio asequible.
La empresa de materiales Gelatex ha aceptado este reto y ha respondido desarrollando un modelo de producción capaz de producir 300 toneladas de carne cultivada al año. Este modelo se basa en matrices o scaffolds que -según afirman- han aumentado el rendimiento de producción de carne cultivada a 5 kg/h y que precisa de hasta un 28% menos de recursos energéticos.
El reto principal: Carne de laboratorio al alcance de todos
Gelatex ha patentado una tecnología propia utilizada para la producción de carne vegetal que se basa en la producción de nanofibras, un material hasta el momento con un alto coste de producción que la empresa ha conseguido contrarrestar. Gelatex ha abierto una nueva instalación de investigación, ingeniería y fabricación, en la que pretende llevar el desarrollo y la producción de sus materiales nanofibrosos al siguiente nivel.
Gelatex lleva unos años siendo pionera en Europa en la producción de nanofibras para la recreación de tejidos. Sin embargo, la mayoría de sus desarrollos han ido enfocadas a soluciones biomédicas, como materiales para el cuidado de heridas que reducen las cicatrices, materiales de filtración de base biológica, etc. Esta empresa se fundó en 2016 y ha escalado rápidamente hasta recaudar 1,2 millones de euros en 2021.
En su último movimiento, ha dirigido sus objetivos hacia la industria alimentaria, desarrollando un novedoso método de hilado en solución de alta capacidad y un dispositivo para la fabricación de nanofibras, con el fin de innovar en el procesos de producción de la carne cultivada. El material se presenta en rollos, es fácilmente escalable y hasta un 90% más barato.
Carne animal-free, pero también sostenible
Otro de los retos a los que se enfrenta esta industria emergente está relacionado con la cantidad de recursos energéticos que se necesita para fabricar la carne cultivada. El objetivo es ofrecer un producto con características similares a la carne de origen animal, que además suponga un menor impacto ambiental.
La producción de Gelatex no necesita un gran complejo de fabricación: una máquina industrial capaz de producir hasta 5 kg/h de material ocupa menos de 10 m2. El centro de produccióncon fabricación, oficinas, laboratorios (incluidos los de química, materiales y una célula) y un centro de desarrollo y montaje de equipos, todo bajo el mismo techo, evitando el recorrido de kilómetros por parte de las materias primas.
Teniendo en cuenta la pequeña huella de producción y el rápido desarrollo y fabricación de maquinaria en la propia empresa, el equipo de Gelatex confía en poder adelantarse a la demanda y seguir el ritmo del rápido crecimiento de la industria. El objetivo es que la carne final cueste lo mismo o incluso menos que la carne convencional actual. La empresa se encuentra actualmente en proceso de pilotaje con las principales empresas de carne cultivada, probando diversos ingredientes de origen vegetal para optimizar aún más el producto y asegurar la producción y el envasado de acuerdo con los más altos estándares de higiene y seguridad alimentaria.
Actualmente, el producto de Gelatex se produce con un 28% menos de consumo eléctrico en comparación con las alternativas del mercado. En el futuro, esperan llegar a una fabricación sin luz que no requiera presencia humana, así como utilizar principios de fabricación ecológica.
Hacia dónde va Gelatex
La empresa, respaldada por Techstars, tiene la misión de hacer que la carne cultivada esté disponible en los supermercados. Además, tiene previsto duplicar el volumen para finales de año en sus nuevas instalaciones de Tallin (Estonia). De este modo, proporcionará suficientes matrices para la fabricación de 300 000 kg de carne cultivada al año.
«Las nanofibras se han utilizado durante mucho tiempo para la ingeniería de tejidos, pero hasta ahora han sido caras y difíciles de escalar. Por tanto, no existen soluciones viables para las empresas de carne cultivada. En Gelatex resolvimos la fabricación de nanofibras escalables debido a nuestra propia necesidad en un principio y ahora nos alegramos de poder eliminar un reto que necesita ser resuelto para las empresas de carne cultivada». Algunas empresas de carne cultivada aspiran a tener una capacidad de unas 50-150 toneladas de carne al año ya este o el próximo año. Teniendo en cuenta esto, Gelatex tiene capacidad suficiente para satisfacer la demanda anual de matrices de las 3-4 primeras empresas de carne cultivada que entran en el nivel de producción», comenta el director general de Gelatex, Märt-Erik Martens.