La compañía tecnológica Intel ha celebrado en madrid una nueva edición de sus Intel Trends Day, que en esta ocasión ha dedicado a analizar la relación entre la Tecnología y la Gastronomía. Representantes de cuatro tendencias diferentes dentro de este ámbito han compartido con los asistentes sus proyectos, sus experiencias y su visión de cómo la tecnología está impactando en el panorama gastronómico. TechFood Magazine ha tenido el placer de moderar este interesante debate.
Malwine Steinbock, CEO y co-fundadora de CookBooth, (plataforma que conecta a cocineros amatuers y profesionales, foodies y amantes de la cocina en general) ha destacado cómo el movimiento foodie y la pasión por la gastronomía y los chefs ha encontrado en las nuevas plataformas digitales y en los dispositivos móviles un aliado ideal para expandirse y reinventarse. No en vano, CookBooth sería una versión 3.0 del tradicional libro de cocina, que une la receta, el formato multimedia, el concepto de comunidad y la pasión por compartir.
Como CIO del Grupo Telepizza y responsable de la investigación y aplicación de las nuevas tecnologías a las estrategias y desarrollo del grupo, Emilio Tovar ha avanzado alguna de las iniciativas en las que está trabajando la compañía con partners como Telefónica o Intel. Como Click&Pizza, una novedosa fórmula para pedir nuestra pizza a domicilio basada en Internet de las Cosas. Similar al botón Amazon Dash, la propuesta de Telepizza consiste en un pequeño dispositivo, del tamaño de los imanes que solemos tener en la nevera, a través del que podemos pedir nuestra cena favorita con un solo clic.
Los asistentes también han podido familiarizarse con el concepto de social dining, o la versión gastronómica de la economía colaborativa, gracias a Leonor Fernández, la primera anfitriona con la que contó la plataforma EatWith cuando desembarcó en nuestro país. Para esta usuaria intensiva de las cenas organizadas por particulares, la tecnología ha sido básica para desarrollar este tipo de experiencias «es lo que nos permite ponernos en contacto unos con otros, y en cualquier parte del mundo. Pero además, estas plataformas facilitan algo muy importante, la posibilidad de calificar a usuarios y anfitriones y consultar las puntuaciones. Esto es básico para generar confianza.»
El punto dulce ha llegado de la mano de la Alma Obregón, una de las reposteras más populares en España y que cuenta con una legión de fans y seguidores. Alma combina los medios tradicionales como los libros de recetas y los programas de televisión, con su blog y las redes sociales. «Actualmente la que me más uso y me permite comunicar mejor mi actividad es Instagram. Y desde luego, en mi cocina no falta nunca el móvil y la tableta».
Está claro que los gourmets de nuevo cuño tienen en la tecnología unos aliados perfectos. El food search, food sharing, food porn y el social dining han llegado para quedarse. Y si no, siempre podremos pedir una pizza casi con solo pensarlo.